budi- qué??? buuuuuuuuu!!!

Respondí porque preguntaron y otros contestaron, aparte ya desde el principio la recalcitrante insignia de la universidad se hacía sentir en la temática que exponía el orador de turno. ¿Era acerca de religiones el monólogo? Casi.
No tardo en producirse lo inevitable si hablamos de pertenencia. La descalificación fue clara, la boca del católico se llenó de su palabra "inequívoca", su ley decía que le es imposible imaginarse a una persona que tuviera siquiera un instante sin apego a algo. El apegado a la cruz del hombre muerto que luchó contra la piedra que hoy lo encierra en tantos lugares... Fue sincero, pero sabía de personas con afinidad a religiones distintas en la sala. Es decir, aplastada la esencia de las religiones orientales... la iluminación ¿imposible?
Faltó decirle si acaso su cielo era tan fácil de conseguir, si el "ama a tu prójimo como a ti mismo" era cumplido por muchos de verdad. Moros, cruzados, sionistas... ahí están, matándose unos a otros por ambición y deseo de poder, disfrazado de "Dios"
A quienes sentimos la espiritualidad de manera distinta, con otra intuición, sin pretender convertir a nadie (lo dijo el Dalai Lama, la conversión que venía desde afuera es confusión), por lo menos déjennos explicar nuestros motivos. No es una moda, menos tratar de llamar la atención. Ya es suficiente con la etiqueta que hay que usar, bien molesta por lo demás porque tiende a enredar... no es una religión, sólo una secta tiene un cierto líder político que anda por el mundo dando charlas psicológicas y defendiendo a su pueblo de las hegemonías.